lunes, 3 de noviembre de 2014

UN SUEÑO DE LIBERTAD PARA AMERICA





       UN SUENO DE LIBERTAD PARA AMÉRICA

     Erich Fromm (1900-1980) en su libro: “El Miedo a la Libertad” (1941) señaló que la existencia del hombre y la libertad son inseparables. Aborda la paradoja libertad/esclavitud y los vínculos de los paradigmas, de los diferentes sistemas sociales que ameritan un nuevo orden en  la vida humana. Este concepto enmarcado dentro de lo que pudiéramos llamar Antropología Filosófica, Fromm reflexiona en torno a la relación de la esencia del  hombre, su destino en la sociedad: ser libre. Sin embargo, en la realidad sabemos que existen hombres libres y esclavos, esclavos de los dogmatismos religiosos, políticos,  económicos, entre otros, como aquellos  que señaló Nietzsche en la Genealogía de la Moral, donde estudia los preceptos morales de Occidente desde Sócrates hasta su tiempo. Al referirse a  la moral de esclavos señala el mecanismo de control ideológico que la religión católica le imponía  a sus fieles, anulando su capacidad crítica, entablando lo que él llamaba una moral de señores y esclavos (política-sacerdotal) sobre las masas subyugadas, sobre todo, a  aquellos grupos cargados de amargura y hondo resentimiento. Iglesia y Estado disputándose el control de la sociedad. Esto explica de alguna manera el papel de la Iglesia en el proceso de colonización en América. O los seres alienados y enajenados de las fábricas a la que se refiere Marx en el Período de la Revolución Industrial,  o las mentes robotizadas seguidores de los dogmas políticos de Hitler en Alemania, creyentes en una raza superior  y otra inferior. Mussolini en Italia, con el dogma de  una élite política  que define el destino de los hombres en la sociedad. Adoctrinan hombres capaces de seguir las ideas más descabelladas sin ninguna actitud crítica. Pero más allá de cualquier “grillete mental” o físico, la libertad del hombre es la  elección que éste haga  a través de la voluntad y autodeterminación y del pensamiento puesto en acción .Rousseau decía que el hombre es libre por naturaleza pero se encuentra encadenado, no obstante, no todos los hombres son libres, ni todos nacen libres, ni todos están dispuestos a ser esclavos. Bolívar, Martí y Rubén Darío son los mejores ejemplos  de la aspiración de la libertad  natural secuestrada por la fuerza, por las armas y por la violencia. La libertad es una aspiración del espíritu humano de  realización y autonomía.

     La América colonizada estuvo subyugada por el poder político de las grandes potencias marítimas de la época: España, Inglaterra, Holanda, Francia, quienes se repartieron el botín producto de una invasión hegemónica, impositiva, implantaron su mecanismo de dominación con fórmulas políticas que solo favorecían a las naciones de ultramar. Tres siglos de dominación que refiere Bolívar, (1815) en la Carta de Jamaica en la que empezaron las barbaridades que los españoles cometieron en el gran hemisferio de Colón. Barbaridades que la presente edad—1819— han calificado fabulosas, porque parecen superiores a la perversidad humana que jamás serán creídas por los críticos modernos.  En el Discurso de Angostura, (1819), Simón Bolívar en Cordero y Aguiar (Comps.)(2007) sobre este punto señaló: 

         ”...la América todo lo recibía de España que realmente la había privado del goce y ejercicio de la tiranía activa; no permitiéndoles sus funciones en nuestros asuntos domésticos  y administración interior …estábamos abstraídos , ausentes del universo en cuanto era relativo á (sic) la ciencia del Gobierno …uncido el Pueblo Americano al triple yugo de la ignorancia , de la tiranía y del vicio , no hemos podido adquirir ni saber , ni poder , ni virtud” (p.109).

     Continúa el Libertador, en la Carta de Jamaica (1815) en  (ob. cit.) “Jamás éramos virreyes ni gobernadores sino por causas muy extraordinarias; arzobispos y obispo pocas veces; diplomáticos nunca; militares en calidad de subalternos; nobles sin privilegios reales”… (p. 78-79).

     Esta realidad que he venido presentando de América , naturalmente, con el correr del tiempo, se va a ir  gestando en la preocupación de los hombres a lo largo del siglo XIX, la necesidad de  una América libre, más justa; un sueño cristalizado en el pensamiento y acción, particularmente de intelectuales que dedicaron su vida para luchar por la noble causa de la independencia americana, quienes además nos dejaron documentos de trascendencia, de consulta a la hora de esclarecer la problemática de la región. Entre tantos baluartes del pensamiento y su obra cabe mencionar a: Simón Bolívar (Discurso de Angostura, 1819); José Martí (Nuestra América  1891) y Rubén Darío (Odas a Roosevelt, 1904). El propósito de estudiar a estos tres autores,— de los cuales ya  he venido comentando a Simón Bolívar—, con una visión reflexiva como aporte para el debate, como un aporte al pensamiento crítico, como una contribución de una América donde reine la libertad.

     En orden de jerarquía por la data comenzaré por el Discurso de Angostura, 15 de febrero de 1819, cuyo título original es: “Discurso pronunciado por el General Bolívar al Congreso General de Venezuela en el acto de su instalación”, alocución considerada por la historiografía como una de las obras fundamentales del pensamiento bolivariano. En él, Bolívar, entre otras cosas, expone magistralmente su pensamiento político, analiza la situación del pasado de Venezuela para comprender la situación hasta 1819, lo conveniente de instaurar el poder central y sus ideas sobre educación.

     En relación a sus ideas políticas, aunque Bolívar argumentaba en el Manifiesto de Cartagena, (1812) que el gobierno federal es el más perfecto, pero el  más conveniente para las nacientes repúblicas americanas por la anarquía que reinaba en el país y por la falta de cultura republicana, era el gobierno centralista. Argumenta en este documento, “lo que debilitó más el gobierno de Venezuela, fue la forma de gobierno que adoptó, siguiendo las máximas exigidas de los derechos del hombre”, (p.37). Aunque El Libertador está convencido de que el gobierno federal es el más perfecto para proporcionar la felicidad humana en sociedad  no era el más recomendable para los nacientes estados. (ob. cit.) Expresaba que no se encontraban  en aptitud de ejercer por si mismos sus derechos. Aunque él sabe que la tarea de dictador que ha venido ejerciendo con poderes plenipotenciarios es riesgosa, su aplomo, sabiduría y sobriedad de hombre de Estado hizo que impecablemente cumpliera tan peligrosa misión. En el contexto de la nacientes repúblicas, comenta en la Carta de Jamaica, (1815) la América quedó como el Imperio Romano cuando se desplomó, cada desmembración consumó un sistema político conformes a sus intereses y ambiciones  particulares. Esto innegablemente obligaba por la situación política de anarquía, implantar un modelo centralizado que cohesionara, que le diera fisonomía y unidad territorial y política a Venezuela.

     Para justificar este propósito, ha dicho Bolívar, (1819) en Cordero y Aguiar (Comps) (2007) en el Discurso de Angostura en relación a la naciente república no ha sido una simple tempestad política ni una guerra sangrienta, ni una anarquía popular, ha sido todos estos elementos disgregadores juntos, un torrente infernal que hundió a Venezuela. Desde 1812, en el Manifiesto de Cartagena, El Libertador advertía esta situación política de Venezuela, cuando señalaba: una terrible anarquía  en la que la influencia religiosa, la dominación civil y militar  serán otros tantos instrumentos de que se valdrán los enemigos para controlar las regiones. Es por ello que Bolívar opta por un gobierno centralista  y reunir todos los estados de Venezuela en una República indivisible, de lo contrario es su muerte. Está consciente que el sistema federativo, no era dado a los venezolanos gozarlo repentinamente al salir de las cadenas, porque según Él nuestra constitución moral no era robusta; podía ser más bien ideada para una “República de Santos”.

     Otro aspecto de trascendencia del Discurso de Angostura, es lo relativo a la educación popular, que debe ser a su juicio la prioridad del Congreso. Una opinión que compartía con su viejo maestro de primeras letras Don Simón Rodríguez, quien en su libro: Defensa de Bolívar, (1830) señala que entre la independencia y la libertad hay un espacio inmenso, la independencia es el resultado de un trabajo material, la libertad sólo se consigue pensando. En opinión de ambos ésta, iba a consolidar la libertad de América.

     En esta misma línea de pensamiento, hacia 1891, José Martí (1853-1895), político republicano democrático, pensador, escritor periodista, filósofo, poeta, líder de la Primera Revolución Cubana, Héroe Nacional de Cuba escribió un documento esclarecedor de la realidad americana titulado: Nuestra América, publicado 72 años después del Discurso de Angostura, en  el que podemos encontrar puntos comunes: la libertad de América. Ha dicho Martí (ob. cit.) en la misma apreciación de Rodríguez y Bolívar, “Trincheras de ideas valen más que trincheras de piedras…El problema de la independencia no era el cambio de forma, sino de espíritu”,   (p. s/n). Estas son ideas sintéticas claras que invitan a la acción, no se trata como decía Bolívar el cambiar la tiranía española por una  criolla, sino más bien de cambiar toda una estructura en todos los órdenes que respondieran a los intereses de América, para ello el ingrediente principista es la libertad. Sobre este punto, Martí,  citado por Goldar, (1971) el mensaje de la obra “Nuestra América” refiere la unidad de Latinoamérica, un folleto contra la desigualdad social, una propuesta de consignas anticoloniales. Martí, —continúa el autor—unió la palabra con el hacer y la idea con la realidad. Fue un revolucionario. Sus ideales revolucionarios son claros, “para gobernar estos países hay que quitarse las antípodas de la cultura libresca  y apelar a la realidad bolivariana…el conocimiento de lo nacional debe ser el método y el punto de partida para la trasformación de la realidad”, (ob. cit., pp.7-8). Una realidad—la americana—que en 1819 que magistralmente describió Bolívar en el Discurso de Angostura de esta manera:

      “Es imposible asignar con propiedad, á (sic) qué familia humana pertenecemos. La mayor parte del Indígena se ha aniquilado, El Europeo se ha mezclado con el Americano y con el Africano, y éste se ha mezclado con el Indio y con el Europeo. Nacidos todos del seno de una misma Madre, nuestros Padres, diferentes en origen y en sangre, son extrageros (sic), y todos difieren visiblemente en la  epidermis: esta desemejanza  trae un reato de la mayor trascendencia”, (ob. cit., p.119)

     Esta es nuestra América, la América de José Martí, esa porción de tierra que palpita en su corazón cuando los Estados Unidos le despojó a México, Texas, y que contestatariamente, contrariando el aforismo de James Monroe, (1823) “América para los Americanos” enuncia uno más humano más noble más universal: “América para la humanidad”, que naturalmente es la bandera de lucha contra cualquier intervención o colonización en América. La Doctrina Monroe establecía que cualquier intervención de los estados europeos en América sería visto como un acto de agresión que requeriría la intervención de los Estados Unidos. Esta doctrina daría paso en adelante,  a que este país implantara mecanismos más severo de ocupación territorial como el de Theodore Roosevelt “Big Stick” (gran garrote, 1901) y la de Franklin Roosevelt “New Deal” (nuevo reparto, 1929). Una situación política que Simón Bolívar profetizó en 1829 en una carta dirigida al Coronel  Patricio Campbell donde expresó:… “los Estados Unidos que parecieran destinados por la Providencia  para plagar la América de miserias a nombre de la libertad “, (p. s /n).

     En tono filantrópico pero contundente en relación al abuso de los países hegemónicos de Europa y los Estados Unidos, ha expresado  Martí, (1891): “Peca contra la humanidad el que fomenta y propague la oposición y el odio de las razas”, (p. s/n.). En tal sentido—señala— la colonia continúa viviendo de la república. Esta es una condena  que no queda en palabras, en 1989 funda el Partido Revolucionario Cubano, en 1892 las Bases del Partido Revolucionario Cubano, que entre otras cosas, en su artículo 4 señala… “establecer una democracia”; una lucha por la que va a dar su vida, cuando muere en combate en 1895 en la “Guerra Necesaria”, que había organizado ese año.

     Dejó un gran legado, una filosofía política que abogaba por un gobierno que se debe gestar en el país, un gobierno que no es más que el equilibrio de los elementos naturales del país. Refiere el Apóstol Cubano, (1891 en Nuestra América) que el gobierno no debe ser en ningún sentido la importación exclusiva de las ideas y fórmulas ajenas, teniendo como norte la autocrítica. El pensamiento martiano tiene como fin, al igual que el de Bolívar, la libertad de América, una “América Nueva”. Que tiene  la oportunidad de dejar de ser un continente descoyuntado durante tres siglos por un mando que negaba del derecho del hombre al ejercicio de la razón, que es  naturalmente, el ejercicio de la libertad.

     Una libertad negada a partir de las capitulaciones de Santa Fe, dictada por los Reyes Católicos Fernando de Aragón e Isabel de Castilla, el 17 de abril de 1492  para que Cristóbal Colón cometiera todos los atropellos con los pueblos de lo que va a ser América. Es un documento donde unilateralmente España pretendía apoderarse de los destinos de esta parte del mundo sin el menor escrúpulo. La Capitulación de Santa Fe entre otras cosas sostenía:

     “…Vuestras Altezas hacen al dicho D. Cristóbal Colón su visorrey  y gobernador general en las dichas islas y tierras firmes, que, como es dicho, él descubriere o ganare en las dichas mares…y cualesquiera mercaderías, siquier sean perlas preciosas, oro, o plata  , especería y otras cualesquiera cosas y mercaderías de cualquier especie, nombre y manera que sean que se compraren, trocaren, ganare e hobieran dentro de los límites de dicho almirantazgo …Vuestras Altezas hacen merced al dicho D. Cristóbal …para sí la décima parte de todo ello”…,(p.1)  

     Esta disposición real anuncia toda la implantación de lo que va a ser América toda, una superestructura: virreinato, gobernación y la religión católica y leyes —derecho indiano—  como mecanismo de control político-jurídico explotador; una estructura económica que respondiera a los intereses  de Europa y particularmente de España en las colonias hispánicas, tales como: esclavitud negra, encomienda de indios, monopolio comercial de la corona española, que naturalmente erosionaba la economía y los derechos civiles de la gente de la región. Sobre este punto expuso magistralmente en 1815 en la Carta de Jamaica, y 1819 en el Discurso de Angostura, Simón Bolívar comentado ya en líneas precedentes. Los viajes de Colón en alguna medida, trajeron consecuencias nefastas para la América, que inclusive sigue repercutiendo en el siglo XXI. Aunque cabe decir, aunque suene paradójico, que en el seno de la sociedad colonial fue germinando el espíritu de libertad, de la que nacieron hombres como Miranda, Rodríguez, Bolívar, Nariño, Martí, entre otros. Vinieron a América  figuras tan antagónicas como el  Tirano Aguirre a quien la historia le imputa crímenes horrendos,   y  Fray Bartolomé de las Casas Protector Universal de todos los indios de  las Indias; y Sepúlveda, quien contrario a Las Casas, defendió la legitimidad de la Conquista de América, justificando la guerra contra los indios. Nuestra historia americana es una aporía filosófica.

     Las consecuencias de los Viajes de Colón, naturalmente no ha escapado de las críticas de pensadores a lo largo de la historia. En 1892 el poeta nicaragüense Rubén Darío escribió el poema titulado: A Colón, quien entre otros versos, escribió “¡Desgraciado Almirante! … ¡Cristoforo Colombo pobre Almirante, ruega a Dios por el mundo que descubriste!” .En 1904 en la Oda a Roosevelt —de Canto de Vida y Esperanzaque es uno de los tres documentos estudiados aquí, sobre el Almirante escribió, en tono escéptico: …”la América fragante de Cristóbal Colón, la América católica, la América española, la América en que dijo el noble Cuauhtémoc: ‘yo no estoy en un lecho de rosas’”.Se refiere el escritor al gobernante Náhuatl de la ciudad de Tecnochtitlan, México (1520-1521) y al proceso brutal de la conquista de México por Hernán Cortés.

       Rubén Darío (1867-1916), poeta nicaragüense, conocido como “el príncipe de las letras castellanas”,  que según la crítica, el  de mayor influencia duradera del siglo XX. “Cantos de Vida y Esperanza” es una poesía intimista y reflexiva, sin renunciar a su identidad modernista. Es una poesía angustiada, que expresa su mundo interior arrebatado, particularmente en la Oda a Roosevelt en la que nos muestra su preocupación política en la defensa del mundo hispano, en contra de la colonización anglosajona, especialmente la norteamericana.

     La Oda a Roosevelt es el poema VII de  Cantos de Vida y Esperanza, corona con ella un conjunto de poemas de exaltación de la América Hispánica, iniciado en el poema: “Salutación del Optimista”. Esta oda fue escrita en Málaga, España en 1903 .En su escritura influyeron tres circunstancias históricas: la reciente segregación de Panamá de Colombia, la concesión a los Estados Unido de América de la franja del Canal con la proclamación de Theodore Roosevelt (1858-1919), vigésimo sexto presidente de los Estados Unidos,  con su célebre frase: “I took Panamá” (tomo a Panamá) y la amistad de éste con el presidente de Colombia. Rafael Núñez (1825-1894) quien promulgó la Constitución de Colombia de 1886. Rubén Darío interpreta la crisis que se viven el Istmo de Panamá en Colombia, por la actitud ofensiva de Roosevelt por la insurgencia norteamericana en la región. Paradójicamente a Roosevelt se le otorgó el Premio Nóbel de la Paz. Fue fundador del efímero Partido Progresista. Líder del Partido Republicano, hombre de personalidad enérgica, liderazgo, conocido como personalidad “cowboy”, fue el promotor de la doctrina “Big Stick” (gran garrote). Promovió la terminación del Canal de Panamá. La política del gran garrote —según Roosevelt— consistía “habla suavemente  y lleva un garrote, y así llegarás lejos”. Esta diplomacia da paso al “imperialismo yanki” y su actuación como potencia mundial, a partir de la cual comenzó una ola de dominio político y económico, y el derecho de los Estados Unidos de América de intervenir en los asuntos de América Latina y el Caribe en defensa de los intereses de sus (ciudadanos).

     Con la política del garrote se legitimó el extremo uso de la fuerza  e intervenciones político-militar en todo el continente americano en beneficio propio. Los primeros 18 versos de Oda a Roosevelt, Rubén Darío lo califica como un hombre fuerte, futuro invasor de Suramérica. —Dice de él — “tiene algo de Washington y de Nemrod”, se refiere naturalmente al fundador de Estados Unidos de América; y al legendario personaje mítico, monarca y tirano  de Mesopotamia, constructor de la Torre de Babel mencionado en el capítulo 10 del Génesis en el Antiguo Testamento. Busca personajes contrastantes para describir la personalidad de Roosevelt: Hércules – Mammon, se refiere aquí, al mítico personaje de la mitología griega caracterizado por su fuerza descomunal y al demonio de la avaricia en la Biblia —Mammon en arameo —. Ahora bien, estos adjetivos y epítetos empleados no son gratuitos, los abusos y atropellos estuvieron presente a lo largo y ancho del continente. Según Falconi Calles, (2014) Estados Unidos  inicia con la “Diplomacia de Gran Garrote” su proceso de expansión en el Caribe poniendo a un lado a rivales como Inglaterra y España. A esta última le arrebató a Cuba, Filipina, Guam y Puerto Rico en la guerra de 1898, que termina el 10 de diciembre con el Tratado de París. En 1901 firmó el Tratado de Hay-Pauncefote—Secretario de Estado, EE.UU. John M. Hay y Lord Pauncefote, Embajador de Inglaterra en EE.UU. — con el cual le daba privilegios en la futura construcción de un canal por el istmo en Centroamérica. Con este tratado tomó cuerpo la llamada “doctrina del destino manifiesto” que fue  el conjunto de ideas geopolíticas y económicas que justificaban el expansionismo de territorial de EE.UU.

     Este autor ha dicho que la construcción de esta obra ha sido decisiva, geopolíticamente hablando, para su desarrollo capitalista y hegemonía mundial, ya que integra las costas: atlántica y pacífica. La política del garrote  se aplicó cuando el gobierno de los Estados Unidos y el de Colombia firmaron el Tratado Hay-Herrán, —Secretario de Estado de EE.UU. John M. Hay y Dr. Tomás Herrán— para comenzar la construcción del canal. Como este documento no fue ratificado por el Congreso de Colombia, el gobierno estadounidense apoyó a los “independentista” —panameños— con el objetivo de separar el istmo que formaba parte de la República de Colombia. Fue el momento en que Theodore Roosevelt dijo su célebre frase: “I took Panamá”; quien estaba muy consciente de su importancia estratégica en la geopolítica mundial. Aquí aplicó la política del garrote. El 4 de noviembre de 1903 se nombró la Junta Provisional de Gobierno que administraría la naciente República de Panamá, en consecuencia que el departamento de istmo pasó a ser un nuevo país. Catorce días después se suscribió el Tratado Hay-Buneau-Varilla, en razón del cual Estados Unidos obtuvo la concesión para la construcción del canal.

     Ya la importancia estratégica del Istmo de Panamá la había profetizado en la Carta de Jamaica, (1815) Simón Bolívar, (ob. cit.) cuando señala: “sus canales acortarán las distancias del mundo: estrecharán los lazos comerciales de Europa, América  y Asia”…, (p. 90). Hacia 1824 El Libertador, en la Convocatoria del Congreso de Panamá sobre este tema escribió: el Istmo de Panamá... está, en el Centro del Globo, viendo por una parte el Asia y por la otra el África y la Europa…El Istmo está á (sic.) igual distancia de las extremidades… en él encontrarán el plan de las primeras alianzas, que trazará la marcha de nuestras relaciones con el universo ¿Qué será entonces el Istmo de Corinto  comparado con el de Panamá?

     La política expansionista de los Estados Unidos comienza con lo que se denomina: “Conquista del Oeste”, cuando compraron Louisiana a Francia; Florida a España y Alaska a Rusia. Se habían apropiado por la fuerza de: Texas, Nuevo México, Arizona, California, Nevada, y una parte de Colorado. De esta forma tomó cuerpo además la “Doctrina del Destino Manifiesto”, fundamentada en posiciones geopolíticas y económicas que justificaban la expansión territorial de los Estados Unidos de América. (Enciclopedia de la Política de Rodrigo Borja, s. f.)

    Con mucha razón Rubén Darío se dirige a Roosevelt de Alejandro-Nabucodonosor, refiriéndose, no obstante, a Alejandro Magno o Alejandro El Grande, (356-323 a de J. c.)  , general griego  fundador del Imperio Greco-Oriental —Helenístico—  unos de los más grandes que ha tenido la historia de la humanidad,  quien acometió la empresa político-militar  más importante del mundo antiguo, que significó cambios trascendentes en todos los órdenes de la vida; que sólo en  la Época Moderna logró Cristóbal Colón. Nabucodonosor, (s. XII a de J. C.) uno de los primeros reyes de Babilonia, quizá el más legendario y el más poderoso, según la Biblia,  gobernó esta ciudad. Rubén Darío escoge en su poema símiles  de fuerza y arrojo político-militar de fuerza superlativa y enérgica, personajes históricos conocidos para la gente común para describir la personalidad de Roosevelt, quien naturalmente reinterpreta la “Doctrina Monroe” reservándose para su país el “orden en el hemisferio occidental”, implantando una política exterior agresiva e intervencionista que tuvo  como objetivo la consolidación de la hegemonía de los Estados Unidos; utilizando como pretexto la incapacidad de los países centroamericanos, latinoamericanos y caribeños para gobernarse a si mismos y la falta de responsabilidad de éstas de cumplir con los compromisos internacionales.

     Frente los abusos que hoy pudieran cometer los países hegemónicos del mundo, en contra de los países latinoamericanos y caribeños, el pensamiento libertario de Bolívar, Martí y Rubén Darío tomará cuerpo y forma en ideas en los hombres y mujeres de esta región, dándole fisonomía a las modernas repúblicas libres del porvenir, porque el pensamiento futurista, profético y original de estos “Hombres” está vivo entre nosotros. Simón Bolívar, (1819) en (ob. cit.) nos dejó como legado su pensamiento para vivir en una República Democrática libre. Al respeto señalaba, que los elementos esenciales para la vida republicana, las elecciones son esenciales en los sistemas populares, la alternabilidad  en el poder,   declarando los derechos del hombre, la libertad de obrar, de pensar, de hablar, y de escribir, pues las bases de un gobierno republicano genuino es la Soberanía del Pueblo  y la división de los poderes, porque consideraba nada más nefasto como su mezcla. Por ello a dicho Rubén Darío, (1904) en relación a la libertad de América, la América nuestra desde los remotos momentos de su vida, vive de luz, de fuego, de perfumes, de amor, la América de Moctezuma, del Inca. En 1891 escribió Martí en relación a la soberanía de los pueblos que la bandera de los pueblos nutridas de savia gobernante en la práctica continua de la razón y de la libertad. Sobre la libertad apunta Simón Bolívar, (1819), (ob. cit.) en la última oración con que culmina su Discurso de Angostura: “Un Gobierno que haga triunfar bajo el imperio de las de las Leyes inexorables, la igualdad y la libertad”, (p.152). Esto es, en definitiva, el sueño de libertad para América a esta hora. 


 MUESTRA VISUAL

Perfecto Aristóbulo Aguilera (Cantalicio o Cántalo)(1918-1998)
La Entrada triunfal en Jerusalén (1997)
Esmalte industrial/cartón piedra
Maturín, Estado Monagas, Venezuela
Colección: Manuel Bas, Caracas, Distrito Capital, Venezuela


Perfecto Aristóbulo Aguilera (Cantalicio o Cántalo)(1918-1998)
Muerte del Libertador a los 47 años de Edad
Esmalte industrial/cartón piedra
Maturín, Estado Monagas, Venezuela
Colección: Manuel Bas, Caracas, Distrito Capital, Venezuela

Ciriaco Iriarte (Canta Bonito) (1905-1984)
Velero (1975)
Esmalte industrial/Madera contraenchapada
Naiguatá, Estado Vargas, Venezuela
Colección: Manuel Bas, Caracas, Distrito Capital, Venezuela


REFERENCIAS

—Enciclopedia de la Política de Rodrigo Borja. (s.f.).Diplomática el Garrote. Concepto. D. [Enciclopedia en línea].Disponible en:

—Falconi Calles, Fernando. (Columnista). (2014, Febrero 21). La Política del Gran Garrote .El Telégrafo. (Opinión). [Periódico en línea]. Disponible en: www.telegrafo.com.ec/opinión/colunmista/item/la-politica-     delgrangarrote.html.Visita:25/10/2014

—Goldar, Ernesto. (1971).Martí y la Primera Revolución Cubana. [Prólogo].29.Biblioteca Fundamental del Hombre Moderno. Buenos Aires, Argentina: Centro Editor de América Latina.

—Martí, José. (1886, Septiembre 18).México y Estados Unidos. Buenos Aires, Argentina: La Nación. En: Goldar, Ernesto. (Comp.).(1971). Martí y la Primera Revolución Cubana. Biblioteca Fundamental del Hombre Moderno.29.Centro Editor de América Latina, Buenos Aires, Argentina, pp.19-23.

——————. (1889, Abril, 10). Bases del Partido Revolucionario Cubano, Cayo Hueso. En: Goldar, Ernesto. (Comp.). (1971).Martí y la Revolución Cubana .25.Biblioteca Fundamental del Hombre Moderno, Buenos Aires, Argentina: Centro Editor de América Latina, pp. 101-102.

——————. (1891, Enero 10).Nuestra América. La Revista Ilustrada de Nueva York. Nueva York .Biblioteca Digital Ciudad/Seva, p. s/n. [Revista en línea].Disponible en:www.ciudadseva.com/textos/otros/nuestra_america.htm.Visita:16/10/2014.
—Rubén Darío. (1904). Cantos de Vida y Esperanza. Oda a Roosevelt. [Poema VIII]. P. s/n. [Documento en línea].Disponible en:

—————— .(1892/1907).A Colón. [El Canto Errante]. [Poema en línea].Disponible en: www.poesi.as/rd011004.htm .Visita:24/10/2014.
           
—Simón Bolívar. (1812, Diciembre 15).Manifiesto de Cartagena. Cartagena de Indias. En: Cordero, Damarys y Aguiar, Mike. (Comps.).(2007).Simón Bolívar. Ideario Político. Once Documentos de Trascendencia Histórica. (3ª. ed.).Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.29-49. (Tomado de José Félix Blanco y Ramón Azpurua, 1978.Documentos para la Historia de la Vida Pública del Libertador, t. IV, PP.119-124.

———————. (1815, Septiembre 6).Carta de Jamaica, Jamaica, Kingston.               En: Cordero, Damarys y Aguiar, Mike. (Comps.).(2007). Simón Bolívar. Ideario Político. Once Documentos de Trascendencia Histórica. (3ª. ed.).Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.59-99. (Tomado de: José Félix Blanco y Ramón Azpurua, 1978 .Documentos para la Historia de la Vida Pública del Libertador, t. V. Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.331-342).

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En: Cordero, Damarys y Aguiar, Mike. (Comps.).(2007). Simón Bolívar. Ideario Político. Once Documentos de Trascendencia Histórica. (3ª. ed.).Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.101-152. (Tomado de: José Félix Blanco y Ramón Azpurua, 1978 .Documentos para la Historia de la Vida Pública del Libertador, t. VI. Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.584-598).

——————— (1824, Diciembre 7).Convocatoria al Congreso de Panamá, Lima, Perú. En: Cordero, Damarys y Aguiar, Mike. (Comps.).(2007). Simón Bolívar. Ideario Político. Once Documentos de Trascendencia Histórica. (3ª. ed.).Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.153 -160. (Tomado de: José Félix Blanco y Ramón Azpurua, 1978 .Documentos para la Historia de la Vida Pública del Libertador, t. IX. Caracas: Ediciones de la Presidencia de la República, pp.447-448).

———————. (1829, Agosto, 5).Carta al señor Coronel Patricio Campbell, Encargado de Negocios de S.M.S., Guayaquil, Ecuador. Cruzada Sur. Izquierda Indo-Hispánica, editado 2009, Diciembre 1. [Carta en línea].Disponible en: cruzadasur.blogspot.com/2009/12/carta-al-señor-coronel-patricio.html.

—Vuestra Altezas Fernando de Aragón e Isabel de Castilla. (1492, Abril 17).Las Capitulaciones de Santa Fe. Villa de Santa Fe de  la Vega de Granada, España. [Facsímil]. En: Cortés, Santos Rodolfo. (Comp.).(1971).Antología Fundamental de Venezuela  1492-1902.Materiales para la Enseñanza de la Historia de Venezuela. (3ª. ed.).Caracas: Editorial Pregón, pp.1-2.

Manuel Bas. Profesor Agregado, Universidad Nacional Experimental “Simón Rodríguez” (UNESR).Facilitador de los cursos: Metodología de la Investigación I, investigación Educativa, Introducción a la Investigación, Planificación Educativa, Ética y Praxis de la Profesión Docente, y del Taller de Acreditación por Experiencia. Coordinador de la Comisión Delegada de Sistemas de  Estudios y Experiencias Acreditables (UNESR, Los Teques). Pregrado: Licenciado en Educación, Cum Laudem, (UNESR). Postgrado: Especialista en Gerencia Educacional, Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL). Magíster Scientiarum en Tecnología y Diseño Educativo (UNESR). Curso de Postgrado de Ampliación: Comprensión de la Realidad Educativa Nacional y Ética de la Profesión Docente (UNESR). Actualmente cursa estudios en el Pedagógico de Caracas en el Doctorado: Cultura y Arte para América Latina y el Caribe.

NOTA. Este trabajo fue presentado en el Instituto Pedagógico de Caracas en el Doctorado: Cultura y Arte para América Latina y el Caribe, en el Seminario: Pensamiento Latinoamericano y Caribeño a Cargo del Dr. Omar Hurtado Rayugsen el 28 de octubre de 2014

UN SUEÑO  DE LIBERTAD PARA AMÉRICA

TEXTO Y FOTOGRAFÍA: Manuel Bas
DISEÑO Y MONTAJE ELECTRÓNICO: Esp. Víctor Hernández
APOYO VISUAL: Perfecto Aristóbulo Aguilera. Ciriaco Iriarte

CARACAS, DISTRITO CAPITAL, VENEZUELA,  28 DE OCTUBRE DE 2014

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